También se conoce como billetera, cartera o monedero, entre los hispanohablantes. Una wallet es una aplicación o software diseñado para ayudarte a manejar tus bitcoins (o cualquier otra criptomoneda). Básicamente, te permite enviar y recibir pagos, así como llevar el registro de las transacciones que realizas y de tu saldo disponible, tal como lo haría una aplicación de banco.
Cada wallet genera direcciones o llaves públicas que funcionan como un identificador en la blockchain. Una llave pública se ve como una larga cadena de números y letras, que se crea mediante criptografía.
Así se ve una llave privada:
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Así se ve una llave pública (Recuerda que se derivan de las llaves privadas):
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Y así se ve una direccion de una wallet (derivada de las llaves públicas):
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Este identificador (la dirección de la wallet) es el que compartimos con otros usuarios para recibir pagos en bitcoin, de la misma forma que lo hacemos con un número de cuenta bancaria para recibir transferencias de moneda fíat. Podemos generar tantas direcciones de wallet como queramos, a partir de nuestras llaves públicas, para aumentar la privacidad.
Aunque se podría pensar que las wallets de bitcoin almacenan las criptomonedas, no es así. En realidad, contienen tanto la llave pública como la llave privada. Esta última es la pieza que completa el sistema. La llave privada es una clave criptográfica que está enlazada con la llave pública, sin la cual es imposible acceder a los saldos de nuestro monedero. Así que no la pierdas o el acceso a tus bitcoins se perderá para siempre.
Wallets de bitcoin versus cuentas bancarias
En comparación con el sistema de los bancos, las llaves privadas serían como las contraseñas de acceso a las cuentas bancarias. Claro, con algunas diferencias definitivas.
Por ejemplo, las llaves privadas permiten firmar o validar las transacciones de bitcoin. Es decir, nos dan el derecho de gastar determinadas monedas, como sus legítimos propietarios. En el caso de las aplicaciones bancarias, es el banco quien otorga, o no, este permiso.
Otra gran diferencia es que las aplicaciones bancarias se comunican con una base de datos controlada por el banco. Esta base de datos contiene tus números de cuenta, saldos y claves de acceso, así como tu nombre, teléfono, dirección y muchos otros datos personales.
Por su parte, los monederos de Bitcoin se comunican con la blockchain, que funciona como un registro público de las transacciones, donde los movimientos no están vinculados a información personal, sino a ese conjunto de números y letras llamado llave pública.
Tipos de wallets
Existen dos grandes grupos de wallets de criptomonedas: hot wallets o carteras calientes y cold wallets o carteras frías.
Una cartera caliente se mantiene conectada a Internet. Existen diferentes tipos, como los monederos web, las aplicaciones para computadora o de teléfono móvil.
Las carteras frías son dispositivos físicos parecidos a una memoria USB. También se les conoce como carteras de hardware. Estas solo las conectamos a Internet cuando necesitamos firmar una transacción de criptomonedas. El resto del tiempo, se mantienen sin conexión para aumentar su seguridad.Tener una wallet de criptomonedas bajo tu control es como tener un banco en tus manos. Eres autónomo y libre para decidir qué hacer con tu dinero. Pero como dice aquella máxima: un gran poder conlleva una gran responsabilidad. Así que también serás responsable de custodiar tus bitcoin con seguridad y privacidad.